Una apuesta por la financiación de la cultura. «1% cultural de Zaragoza»

Partimos de la idea de que, hasta la fecha, el equipo de gobierno ha desarrollado una política cultural errante y llena de sobresaltos, protagonizadas generalmente por la nueva dirección del área y de la sociedad municipal. Hemos repetido en numerosas ocasiones que el Ayuntamiento de Zaragoza como institución carece de un Plan Estratégico Cultural que defina la política cultural de esta ciudad y oriente las acciones, programas y actividades. Hasta la fecha, nuestras reivindicaciones han caído en saco roto, como también han caído en saco roto otras reivindicaciones del Grupo Municipal Popular planteando mejoras en la financiación de las políticas culturales, que siempre son las paganas de los recortes presupuestarios cuando hay que ajustarse el cinturón. Y esta última cuestión nos preocupa sobremanera. Sólo hay que ver que el presupuesto de Cultura fue el mismo en 2007 y 2008 (unos 20 millones de euros) y se ha reducido sensiblemente en 2009 (18 millones de euros).

Nos preocupa esta cuestión porque, además de programar conciertos, festivales y actividades, el Ayuntamiento de Zaragoza y el equipo de gobierno tienen la obligación de proteger, conservar, investigar, proyectar y poner en valor todos aquellos bienes culturales que tiene nuestra ciudad (hablamos de restos arqueológicos, de monumentos de interés histórico o incluso de los edificios que están protegidos y catalogados, muchos de los cuales aguardan desde hace años una restauración que les lave la cara y los ponga en valor). Generalmente y, de forma especial, en los últimos años, el dinero del que se ha dispuesto en esta ciudad para ese cometido ha sido más bien escaso y hemos visto como, en algunos casos como el Balcón de San Lázaro, se ha preferido cubrir los restos para ahorrar unos euros que poner esos restos en valor y recuperar la historia de la ciudad.

Creemos desde el Grupo Municipal Popular que el Ayuntamiento de Zaragoza tiene la obligación y la responsabilidad de buscar nuevas alternativas que mejoren la maltrecha economía municipal en lo que política cultural se refiere. Lo que hoy queremos propones es una fórmula de financiación de las políticas culturales que resultará novedosa para esta institución, pero no lo es en lo que a la legislación autonómica en Aragón se refiere, y menos aún en la legislación el Gobierno de la Nación.

Hoy queremos hacer otra apuesta en positivo, una apuesta que ya venía reflejada en el programa electoral del PP de Zaragoza y que podría propiciar un giro importante en la abandonada política cultural municipal y su financiación. Y lo hacemos desde el convencimiento de que, con el 2016 en el horizonte, Zaragoza no será considerada la tercera ciudad de España (ni siquiera la cuarta o la quinta) si no es con una apuesta cultural importante en lo que a programación de actividades se refiere, pero también de puesta en valor del patrimonio histórico-arquitectónico-monumental. Hoy, ciudades como Valencia, Sevilla, Bilbao e incluso Valladolid nos superan en acontecimientos, en producción de eventos de repercusión internacional y en una apuesta decidida por su patrimonio cultural, artístico y musical. Hasta ciudades y pueblos aragoneses con mucha menos población y menos capacidad económica como Teruel, Alcañiz, Tarazona, Valderrobres, Aínsa están explotando mejorar su patrimonio combinándolo con interesantes programas culturales.

Desde el Partido Popular no nos conformamos con ver con desidia las políticas fastos y fiestas a las que nos quieren acostumbrar y demandamos un claro empuje de la política cultural desde este Ayuntamiento con un apoyo económico suficiente. El fin de nuestra propuesta es permitir asegurar una financiación estable y no pendiente únicamente de los vaivenes financieros del equipo de gobierno de turno.

Por ello, los consejeros de la Sociedad Zaragoza Cultural representantes del Grupo Municipal Popular hemos solicitado ya al equipo de gobierno que, a través de esta sociedad, se realice un estudio sobre la puesta en marcha del conocido como “1% Cultural municipal” en las obras y grandes proyectos contratados por el Ayuntamiento de Zaragoza. La idea es que, en los pliegos de condiciones de cada obra pública de la ciudad (tanto si es financiada total como parcialmente por el Ayuntamiento), se incluya como obligatoria la cláusula de destinar el 1% del presupuesto de la obra al fomento de acciones de tutela y puesta en valor del patrimonio cultural de Zaragoza. Crearíamos así una partida económica independiente de lo que se viene presupuestando para actividades culturales. Esta partida del “1% cultural de Zaragoza” tendría como fin de proteger, conservar, investigar y proyectar al exterior los bienes culturales de nuestra ciudad.

Se nos llena la boca con la Candidatura de Zaragoza para ser la Capital de la Cultura en Europa durante el año 2016, pero parece que el discurso del alcalde no pasa de la construcción de grandes infraestructuras millonarias sobre las que hoy existen más sombras que luces. Nos parece bien que se impulsen infraestructuras, pero también pensamos que esas obras pueden contribuir a mantener y conservar el patrimonio. El nuevo estadio de fútbol, por ejemplo, supondrá una inversión de 125 millones de euros (de momento). Al aplicar el 1 % cultural, la ciudad dispondría de 1’25 millones de euros para destinar a políticas culturales. Lo mismo habría podido suceder con las inmediatas obras del tranvía o puede suceder con las obras que ordinariamente contempla el presupuesto municipal. Con esta iniciativa, garantizaríamos que, al menos, cada año hubiese unos millones de euros extraordinarios para políticas de conservación, mantenimiento y puesta en del patrimonio cultural de nuestra ciudad.

Del mismo modo, creemos desde el Grupo Municipal Popular que el Ayuntamiento de Zaragoza debería instar al Gobierno de Aragón a hacer lo mismo. Actualmente, la Ley de Patrimonio Aragonés ya contempla este extremo, pero no se ha desarrollado. De hacerlo, sería posible que todas las inversiones que la DGA tiene previstas en la ciudad reportasen dinero a la política cultural zaragozana, dado que hasta la fecha, en esta materia, la DGA no se ha implicado con la capital aragonesa como sí lo ha hecho en otras localidades, como Teruel, por ejemplo.

Esta es, creemos, una iniciativa pionera en un Ayuntamiento que podría contribuir a consolidar la apuesta de la Capitalidad Cultural para 2016 y que nos permita al mismo tiempo diferenciar nuestro proyecto del de otras ciudades candidatas. Es una iniciativa que entiende la cultura no sólo como festejos, sino como mucho más. Aspiramos a que el equipo de gobierno atienda la solicitud que ya le hemos realizado formalmente en la sociedad Zaragoza Cultural. Si no lo hace, recurriremos a otro tipo de iniciativas políticas para que el Ayuntamiento en pleno se posicione al respecto.